Viene una moto o auto y el perro se sale de control, corre directamente a ellos ladrando sin ningún temor y parece querer meterse por debajo para acabarlos por dentro. Si es muy aventurado, seguirá ladrando cuando el conductor baje.
Viene una moto o auto y el perro se sale de control, corre directamente a ellos ladrando sin ningún temor y parece querer meterse por debajo para acabarlos por dentro. Si es muy aventurado, seguirá ladrando cuando el conductor baje.