Flores y gatos

Proporcionar un entorno enriquecido con plantas y flores es fundamental para el bienestar y la salud mental de nuestros amigos felinos.

Paco Colmenares, Director Editorial

Los gatos son criaturas curiosas y exploradoras por naturaleza, y ofrecerles un ambiente lleno de vegetación no solo estimula su instinto de caza y juego, sino que también les brinda un refugio tranquilo y reconfortante.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que no todas las plantas son seguras para los gatos. Muchas plantas y flores comunes en nuestros hogares pueden resultar tóxicas para los felinos si son ingeridas, lo que podría ocasionar desde malestar gastrointestinal hasta problemas más graves e incluso la muerte en casos extremos.

Por lo tanto, al proporcionar un ambiente con plantas y flores para los gatos, es crucial tomar precauciones y asegurarse de que todas las plantas sean seguras para ellos. Algunas plantas no tóxicas que son seguras para los gatos incluyen las rosas, margaritas y girasoles, la hierba gatera, la lavanda, la menta, la hierba de trigo y la mayoría de las variedades de helechos.

Los helechos, por su forma, caída y multiplicidad de hojitas, parecen llamarles mucho la atención para morderlas. Sí, Garfield está basado en la vida real.

Además, es importante educarse sobre las plantas tóxicas comunes y evitar tenerlas en casa o en áreas a las que los gatos tengan acceso. Entre las más importantes, por comunes o por ser tan vistosas que muchas personas las queremos en casa o jardínes, están los lirios, las violetas, los tulipanes, los crisantemos y, en diciembre, la nochebuena.

Lamentablemente la ingesta de cualquiera de esas podría causar un cuadro muy similar de diarreas, vómitos y falta de apetito, que se puede agravar rápido.

Entre las plantas de interior, es común la llamada teléfono o hiedra del diablo(en general las hiedras) y el aloe vera, o sábila, así como los ficus, azaleas, begonias, y para quienes tienen jardines o espacios más grandes, las orejas de elefante y el eucalipto, árbol invasor por cierto, muy común en la Ciudad de México por una antigua negligencia e idea.   

Con la precaución adecuada y la selección cuidadosa de plantas, podemos disfrutar de la belleza de la naturaleza en nuestro hogar sin comprometer la seguridad y el bienestar de nuestros amigos felinos.

Y con los pastos, es muy fácil en estos tiempos.