¿Has imaginado cómo sería el rol de tus perros o gatos en un mundo de animales? ¿Irían a fiestas, a trabajar? Pues la mente de Louis Wain, fue más allá.
Aydée Varela
La imaginación de este artista inglés, Louis Wain, lo llevó a crear en el año de 1890 unas de las escenas más bellas y graciosas sobre gatos; y hasta algunas con un toque burlón, haciendo una sátira sobre los comportamientos humanos de la sociedad inglesa, en específico de la época eduardiana, donde el comportamiento de las clases sociales continuaba siendo muy rígido y pretencioso.
En realidad sabemos muy poco de Wain. Fue un destacado ilustrador, conocido por sus gatos antropomórficos, que además muestran una evolución estilística a lo largo del tiempo.
Louis Wain, El desayuno de la boda.
La inspiración de Wain
La inspiración de este artista, fue su gato Peter, el cual, junto con su esposa, rescató de la calle. Este modelo de muchas de sus obras, se sentaba a un lado de su esposa enferma, mientras Louis comenzaba a dibujarlo en diferentes ángulos, en acciones chuscas. Con el tiempo y la insistencia de su esposa, Wain comenzó a ser publicado en revistas, periódicos, libros, y a partir de ese momento se enfocaría sólo en sus famosos gatos.
Al adentrarnos en su obra, podemos notar una progresión estilística, de representaciones felinas realistas a más abstractas.
Si bien comenzó pintando gatos realistas en tanto lo físico y el comportamiento, con el tiempo su estilo evolucionó. Sus gatos empezaron a mostrarse con ojos saltones, gestos más expresivos y fuertes, hasta llegar a versiones abstractas y psicodélicas, con patrones, formas orgánicas y colores vibrantes, incluso con semejanzas al cubismo, influenciado por Picasso. Pero su progresiva distorsión en las representación de los gatos, fue atribuida a su deterioro mental, por su lucha contra la esquizofrenia, lo que impactó en su percepción visual.
El famoso escritor H.G. Wells dijo sobre el trabajo de Wain: “Él inventó un estilo de gato, una sociedad de gatos, un mundo entero de gatos. Los gatos ingleses que no lucen y viven como los gatos de Louis Wain se avergüenzan de sí mismos”.
Por ello la obra de Louis Wain representa no solo una evolución artística, sino incluso una ventana a su propia lucha personal con la enfermedad, un poco como ocurrió con Van Gogh, ambos testimonios de cómo el arte puede reflejar la complejidad de la mente humana y su relación con la realidad.
Una Karen que se respeta debe ver esta película sobre la vida de Louis Wain
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