La Dra. Claudia Edwards Patiño, en compañía de Humane Society International, reportó el 1er. impacto en la vida animal, tras el paso del huracán más fuerte que haya tocado tierra habitada en México.
Dra. Claudia Edwards, desde Acapulco, Gro.
El paso del Huracán Otis fue el más destructivo de la historia moderna. Acapulco había tenido otros huracanes anteriormente, pero generalmente la caracterización del daño era en inundaciones, y este con los vientos tan fuertes destruyó estructuras completas, se llevó balcones, no solamente rompió los vidrios, sino los mismos ladrillos.
Con edificios que quedaron inclinados, las afectaciones al primer impacto visual parecían como si se hubiera tratado de un terremoto combinado con una inundación.
Otis pasó de Tormenta tropical a Huracán categoría 5 en menos de 12 horas, alcanzando vientos de hasta 265 km/h
Los más afectados
A diferencia de otros fenómenos, en esta ocasión los animales más afectados parecían ser los de compañía, dado que las colonias más impactadas fueron cercanas a la Costera Miguel Alemán, como la famosa zona de Pie de la Cuesta, en donde se podían encontrar muchos gatos, y se notaba desde la calle los perros en casas ansiosos, asustados y dentro de construcciones derruidas o casi abiertas.
Empresas de alimentos, medicamentos e incluso de feromonas comenzaron de inmediato a realizar donaciones, y la Facultad de Medicina Veterinaria de la UNAM, hizo un gran acopio.
Algunos veterinarios por cuenta propia comenzaron a hacer campañas y todos nos hemos coordinado siguiendo el sistema de comando de incidentes, con la Secretaría de Medio Ambiente, la Coordinación de Bienestar Animal, Protección Civil, específicamente con la unidad canina, y con la Policía Ecológica, todas estas autoridades responsables de atender los temas animales.
Primera línea de ayuda
Además de las comunidades, también acudimos a los albergues y refugios temporales, donde están algunas personas viviendo con sus animales, o donde acuden otras solamente a recibir alimento para los animales que tienen en casa.
Gran parte de los donativos necesitaban enfocarse en primera instancia, en albergues constituidos en Acapulco, también muy dañados.
Ante todo, el agua es lo más complicado de proveer, porque la gente necesita esa agua, así que darle a los animales puede llegar a ser visto como un problema, por lo que esta necesidad básica la que hace más falta; mientras quizá la más complicada sea la sombra, pues el calor que se percibe es provocado por el hecho de que no hay árboles, y las palmeras que quedaron en pie no tienen hojas, lo que hace que la temperatura aumente, generando una situación muy difícil de enfrentar.
Toda la información que necesitas para monitorear y prevenir fenómenos naturales, la hallas en el Atlas Nacional de Riesgo.
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