Vivimos con ellos tantas experiencias felices, juegos, compañía, alegrías e incluso
preocupaciones, que elegir el momento preciso de perderlos se vuelve complicado.
MVZ Ana Paola Velasco Espinosa
Después de vivir quince años con mi pequeño tuve que tomar una de las decisiones más
difíciles: decidir el momento en que le practicaría la eutanasia. Este artículo tiene como
propósito orientar la toma de decisiones, describir el procedimiento y dar algunos
consejos para acompañar a nuestras mascotas hasta el último momento de su vida.
La eutanasia evita el sufrimiento. No está justificada en un animal sano.
Tomando decisiones difíciles
Una pregunta frecuente en el consultorio veterinario es: ¿cuándo es el momento
adecuado para la eutanasia? La respuesta a esta pregunta siempre deberá estar guiada
por la recomendación de un médico veterinario zootecnista. El MVZ, de preferencia quien
ha seguido la historia clínica de nuestra mascota, será el que emita la recomendación
sobre si la eutanasia es justificada o no.
Es importante señalar que, para emitir esta recomendación, los profesionales de la salud
harán un examen físico completo, pero en muchas ocasiones, solicitarán que se invierta
en estudios de diagnóstico complementarios. Esto debido a que en muchos casos la capacidad funcional y estructural de los órganos, así como la viabilidad y la elección de un posible tratamiento, únicamente podrá determinarse con estudios de laboratorio o imagen
como ultrasonido o radiografías.
No sólo implica evaluar los posibles tratamientos para una enfermedad, se considera
también si los animales son candidatos a un posible procedimiento quirúrgico o anestésico, así como si serán capaces de resistir el periodo posquirúrgico o las consecuencias de un tratamiento médico, como por ejemplo, un tratamiento oncológico.
Siempre tomar la decisión con evidencia médica sobre el estado de salud de la
mascota.
¿El momento preciso?
Este dependerá del estado de ánimo del paciente, no debemos esperar a que comience a
sufrir por las complicaciones de una enfermedad o la vejez. Recomendaría tomar la decisión del momento preciso con base en determinantes que no van a cambiar, por ejemplo, cuando nuestra mascota siente dolor, deja de comer o tiene nauseas constantes, cuando su enfermedad le impide respirar o presenta episodios convulsivos frecuentes y no receptivos a tratamiento.
¿Cómo se realiza?
Este procedimiento debe realizarse de preferencia en una clínica u hospital veterinario, a
menos que por algún motivo en particular la mascota no pueda desplazarse. Nuestras
mascotas deberán ser tranquilizadas o sedadas porque este procedimiento no tiene que
ser estresante, traumático o doloroso. Se les colocará un catéter endovenoso para la
administración de los fármacos.
Es muy probable que el personal médico te pida privacidad para hacer este manejo y posteriormente te permitan el acceso para acompañar a tu pequeño.
La aplicación de un fármaco tranquilizante o sedante te permitirá disfrutar con tu mascota
sus últimos momentos, despedirte, agradecer el tiempo en el que disfrutamos su
compañía y prometerle que lo recordarás siempre. El procedimiento implica colocar una
sobredosis de fármaco por vía endovenosa, el MVZ va a monitorear a tu pequeño todo el
tiempo, vigilará su frecuencia cardiaca y respiratoria hasta que ya no esté con nosotros.
Acompañar a nuestras mascotas hasta este momento les dará tranquilidad y sentirán
nuestro cariño hasta el último minuto de su vida, es por ello que no es recomendable dejar
este procedimiento en manos de los profesionales y no hacerlos sentir acompañados.
En conclusión
Después de algunos días de haber perdido a mi pequeño, puedo compartir que la vida
nunca será la misma, que siempre recordaré su compañía, su olor, la forma en que andaba por toda la casa y las muestras de cariño que me daba.
Espero queridos lectores que cuando tengan que pasar por un momento similar puedan sentir la tranquilidad de haber tomado la decisión correcta en el momento adecuado, con la evidencia e información de que era lo mejor para nuestra mascota.
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