Sabemos que los más pequeños mueren por una mascota, pero muchas veces puede ser contraproducente para ellos y el animalito tener un ser vivo de primera mano.
Un animal requiere de muchos cuidados y es una gran responsabilidad que se extiende por muchos años. La tecnología nos ha permitido tener una “compañía” similar a la de una mascota a través de animalitos interactivos, a los que no pasa a mayores si olvidan “alimentarlos” un día.
Estos peluches electrónicos incluyen sonidos y movimientos realistas, así como accesorios para jugar, peinarlos y hasta darles de “comer”. Además, están fabricados con materiales muy similares a su pelaje o piel, que los hace muy agradables al tacto.
La necesidad del mercado es alta y estos productos son muy buscados actualmente, por lo que la oferta ha crecido. Beatriz Gámez Jareño de EL PAÍS Escaparate, analizó a un grupo de mascotas que ya están al mercado y con buenas reseñas en Amazon.
Perro interactivo
Niños y niñas podrán bailar y seguirle la pista a este perrito interactivo que es capaz de reproducir hasta cinco canciones diferentes y bailar al ritmo de las mismas. Su memoria incorpora más de 50 sonidos y reacciones como ladridos. Funciona con cuatro pilas AA, ya incluidas.
Hedwig, mascota interactiva
La famosa lechuza Hedwig de la saga de Harry Potter está disponible como un peluche interactivo con más de 15 sonidos y movimientos, que incluye el aleteo, mover el pico y la cabeza. Su tamaño es de 23 cms y funciona con tres pilas AA, incluida en el paquete.
Poni interactivo
Este poni interactivo es capaz de pestañear y mover las orejas, la cabeza y el cuello e incorpora aproximadamente 80 sonidos. Además, sus mejillas se iluminan y en el modo nocturno cantará una canción.
Mide 35 centímetros y cuenta con un acabado muy suave. Funciona con cuatro pilas AA y la edad recomendada de uso por el fabricante es a partir de cuatro años.
Cerdito interactivo
Este hermoso cerdito puede pasear y bailar con dos modos de juego. Incluye varias sorpresas, como dar besitos sin le acaricias el hocico por más de tres segundos. Incluye un biberón que hace ruiditos cuando come y su correa para pasearlo.
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