Mitos comunes del comportamiento canino

La costumbre, la repetición popular y una pobre investigación veraz, hacen que entre los papás de perros, circulen varios mitos que se arraigan. Desenredemos algunos.

MVZ EMCV (EC) Aline Ixtab Morales Estrada

MVZ EMCV (EC) Alejandro Pérez Castañeda

Especialistas en etología clínica

“Ese perro es muy dominante”, “si la esterilizas dejará de ser agresivo/a”, “no le compres tantos juguetes, eso puede hacerlo mal educado”, “es un chihuahueño, siempre son agresivos”, “cuidado es un pitbull”, estos comentarios es lo que podemos escuchar en un parque para perros, con la familia o en ocasiones hasta con nuestro médico veterinario, sin embargo, ¿esto será del todo cierto?

Empecemos con los perros “dominantes”

En la actualidad ya no se usa la terminología de dominante o sumiso para describir a un perro, debido a que se ha analizado a lo largo del tiempo la historia sobre la domesticación del perro, se ha llegado a la conclusión que ni la dominancia en lobos era como lo creíamos, por ejemplo siempre tenemos en mente que el lobo dominante es el que tiene que ganar siempre todo lo que está a su alrededor y siempre es mostrando agresión de forma constante, sin embargo esto no es así, ni el lobo busca pelear por todo y el perro mucho menos.

Con los perros en realidad su jerarquía es muy diferente, ni se parece a la del lobo aunque provengan de ellos y ni buscan acaparar todo, si tu perro lo hace, quiere decir que tu perro más que dominante, es inseguro. Ellos serán mucho más dinámicos en su jerarquía ante sus recursos (cama, juguetes, figura de seguridad, alimentos, premios, etc.), habrá recursos que no le importen y habrá otros que le sean valiosos, aunque también puede haber perros que le dé igual todo.

En caso en que el recurso sea demasiado valioso para tu perro y no lo quiera compartir, basta con que presente una comunicación adecuada donde muestre gruñidos, muestre dientes, fije la mirada, se aleje con el recurso o simplemente ladre para hacerle saber al otro perro que no debe aproximarse y mucho menos quitarle el recurso. Este tipo de eventos nunca debería de crecer más, el perro que recibió el mensaje se retirará y el perro que mandó el mensaje regresará a la calma.

¿Esterilizar o no?

Nuestra respuesta siempre será “sí”, por cuestiones de salud y tomando en cuenta que en nuestro país existe una gran cantidad de perros en situación de calle gracias a su abandono y que muchos de ellos no se encuentran esterilizados, lo que provoca una reproducción sin control.

Sin embargo, si estás pensando en la esterilización para solucionar un problema conductual, te tenemos malas noticias, esto no será así. Habrá algunos problemas conductuales como por ejemplo el marcaje que nos ayudará como parte de su modificación conductual, sin embargo no es la solución al problema, ya que hay muchos factores que se involucran en un problema conductual, entre ellos el aprendizaje que haya tenido el paciente y el manejo que realizamos nosotros como tutores.

“No le compres tantos juguetes, después será muy rebelde”

Como lo mencionamos en otro número, no importa cuántos juguetes le compres, cuántas camas tiene en la casa, la cantidad de premios alimenticios que compras, la realidad es que los factores que pueden influir de forma negativa a un perro es no haberles dado una correcta socialización siendo cachorros, educarles mediante el castigo, no dejarle jugar con otros perros porque se va a ensuciar o no dejarle caminar en el parque porque no quieren que olfateé los arbustos o postes.

Comencemos a buscar al etólogo clínico para recibir una adecuada orientación para su educación y para aprender a conocer más las necesidades de nuestro perro.

¿Razas peligrosas?

Sin duda puede haber razas más sensibles o con mayor capacidad de daño, pero esto no quiere decir que la agresión sea un componente nato de una raza, existen varios factores alrededor que podrían provocar o desencadenar una agresión en perros, algunos de ellos son el manejo del tutor, las experiencias que viven nuestros perros o la estimulación temprana.

No importa la raza o el tamaño, todos podrán representar un riesgo si no atendimos de forma correcta y a tiempo algún problema conductual o si nuestro perro no estuvo estimulado en su etapa crítica. Como podemos ver, hay mucha información falsa que puede seguir circulando por todas partes y que en ocasiones esa información puede generar más problemas que soluciones, si tienes alguna duda respecto a la conducta de tu perro, acude con un médico veterinario experto en conducta animal, para informarte y romper con estos mitos.

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