Cinco consejos para tener una mascota feliz en departamento

Resulta complicado no considerar el tamaño y necesidades de espacio de una mascota en un apartamento de la vida actual, pero, si bien es algo que si debe pensarse para la mejor calidad de vida de ambos, con buenas rutinas se puede conseguir la convivencia perfecta.

Si estás considerando abrirle las puertas de tu casa a un nuevo miembro de la familia, te compartimos cinco recomendaciones para tener una vida muy productiva y enriquecida.

Formen rutinas

La manera más fácil de educar a un perro o un gato es establecer rutinas claras para hacer actividades. Así ambos sabrán qué hacer, en qué momento y cuándo recibir un premio o felicitación.

La doctora conductista Annie Valuska, sugiere en el blog oficial de Purina que “es importante mantener la rutina de tu mascota lo más intacta posible. La alimentación, el baño y las caminatas deberían darse en un mismo horario”.

Los animales domésticos siguen patrones de conducta, y si estos hábitos cambian con mucha frecuencia, se confunden. A ellos les gusta y les hace sentir cómodos tener una rutina y nosotros como tutores debemos programarla, esperando pronto sean ellos quienes nos pidan la actividad en el horario habitual.

Esto también es positivo para nosotros, ya que podemos programar nuestras tareas con más orden, sabiendo en qué momento del día debemos atender a la mascota.

Su propio espacio

Si bien es muy complicado asignarle a un perro o gato una habitación entera, es importante reservarles un rincón de la casa para que pueda tener su cama, juguetes y alimentos. En el caso de los gatos en clave otro espacio para su arena. Además, los gatos siempre necesitan de un lugar para separarse de la familia cuando así lo requiera, un lugar que les de confianza y seguridad.

Para que los perros hagan sus necesidades (si no pueden salir o están muy pequeños), lo recomendable es delimitar un área dentro de la casa y enseñarle a usarla con ese fin.

Proteger muebles y accesorios

Conforme van creciendo. los perros van dejando de destruir el interior de la casa, pues además de irles enseñando que no deben hacerlo, queman su energía con paseos y salidas al exterior. Al contrario, los gatos pasan más tiempo adentro y disfrutan de escalar por cortinas y muebles, así como de afilar sus uñas en sillones y jugar con todo lo que puedan tirar.

Para ambos casos es necesario prevenir el daño protegiendo los muebles que les resultan atractivos. Es importante llamarles la atención cuando ocurren estos desperfectos, sin golpes o gritos que no entenderán, pero si alejándolos del lugar o, en el caso de hacer del baño en otro espacio no asignado, llevándolo a su lugar en los primeros signos de querer hacer sus necesidades.

Cuando una mascota empieza a destruir algo lo más seguro es que esté aburrida. Para ello es necesario enriquecer su espacio ofreciéndole juguetes y cosas qué hacer. Los gimnasios para gatos son una buena opción y para los perros no fallan las pelotas o cuerdas.

Ventilación y aseo constante

Aunque la mascota no salga, como en el caso de los gatos, se debe tener un programa de limpieza general de la casa, además de siempre mantenerla bien ventilada para evitar malos olores y enfermedades.

Los baños para las mascotas varían mucho en frecuencia, sobre todo teniendo un perro o un gato. El veterinario podrá recomendar cada cuándo se le debe bañar basado en su especie, edad y tipo de pelaje. Adicional a los baños, el cepillado frecuente del pelo y el aseo bucal son actividades que deben ser consideradas, sin importar tipo de mascota.

El desorden y suciedad que produce una mascota es considerable en una casa, por ello es necesario mantenerla más limpia de lo habitual. Tanto tener una limpieza de las áreas donde la mascota se pasea como de su lugar asignado, recoger sus juguetes y ubicarlos siempre en el mismo lugar, contribuye a que su mascota entienda las reglas de la casa y sepa dónde deben estar.

Ejercicio para mantener la salud

El ejercicio es muy importante para el comportamiento y la salud de la mascota. En el caso de los perros, dependiendo de los hábitos de cada raza, necesitarán de actividad para desarrollarse, descansar mejor y ser felices. Existen razas que dependen más de la actividad física y amplios espacios para vivir, por lo que es muy recomendable investigar un poco sobre ello antes de agregar un can en nuestra vida.

En cuanto a los gatos, si bien ellos son más independientes y juegan por su cuenta con juguetes y objetos que se encuentran, es bueno participar en sus juegos. Cuando el tutor se suma a la diversión fortalece los lazos con el felino y crea nuevos juegos que al gato encantarán.

Una recomendación para ambas mascotas es finalizar las rutinas de modo que el perro o gato se enteren, así sabrán cuándo inician y cuándo terminan, lo que les creará una rutina.

Sin comentarios

    DEJA UNA RESPUESTA