Pasear en auto puede ser muy divertido para algunos perros, pero agotador para otros. Lo más importante, es que empecemos por hacerlo seguro y cómodo.
Ma. Isabel Oyuky Martínez, V. M. Esp. Negocios Veterinarios
Las salidas en carro, ya sea por paseo o necesidad, suelen ser divertidas, pero ¿estás tomando las medidas necesarias para proteger a tu peludo? El calor, el tráfico, los mareos, la ansiedad o la falta de costumbre pueden ocasionar que tanto tú como él no la pasen bien.
Hidratación
Estamos iniciando la temporada de calor y, por ende, el riesgo de insolación o golpe de calor, se incrementan. Si te es posible evita los viajes entre el mediodía y las 5 de la tarde. Si esto no es posible, entonces hidrátalo bien. Recuerda que ellos generan más calor más rápido, por lo que la deshidratación es mucho mayor que en nosotros.
Puedes humedecer su cara y su pancita para que le ayude a compensar el incremento de temperatura durante el viaje. Razas braquicéfalas como Bulldog, Pekinés, Shih Tzu, Lhasa apso, Shar Pei, Bóxer, Pugs o cualquier mestizo que tenga un hocico corto, tienen una genética complicada, por lo que, si es necesario, repite el proceso de humedecerlo varias veces durante el viaje.
Por nada del mundo lo dejes dentro del automóvil durante el día, no importa si las ventanas están abiertas o si sólo serán unos minutos. Es muy peligroso para su salud y en pocos segundos la temperatura puede elevarse lo suficiente como para causarle un golpe de calor que podría terminar en una ida de emergencia al hospital o incluso su muerte.
Mareos
Algunos peludos no están acostumbrados a viajar en auto o son demasiado sensibles al movimiento de éste. Si el plan es viajar en carretera o la distancia es considerable, acércate a tu Médico Veterinario de confianza y pregúntale qué puedes darle para evitar que su alimento termine en el tapiz de tu vehículo.
Nunca debes automedicar, ya que no conoces la dosis exacta y el medicamento adecuado para él, algunos de uso humano son tóxicos para ellos. Evita un envenenamiento accidental y una hospitalización innecesaria.
Quizá también puedes planear mover un poco su rutina de alimento y no darle de comer al menos una hora antes del viaje, o bien, si las horas de ayuno no son significativas, puedes ofrecerle su ración cuando llegues a tu destino.
Evacuaciones
Si el viaje es programado, dedícale unos minutos para darle paseo previo. Con esta sencilla medida ayudarás a que esté menos inquieto e intentar que haga sus necesidades antes de subir te ayudará a prevenir accidentes y harás que su viaje sea más placentero.
Muchos de nuestros peludos sueltan pelo que se queda por siempre entre las costuras de los asientos, que incluso después de lavarlos o aspirarlos, permanecen. Existen fundas especiales, incluso impermeables, que funcionan como barrera y te ayuda a mantener el tapiz de tu auto libre de suciedad, sin embargo, si no cuentas con presupuesto, puedes ayudarte de alguna sábana, toalla o cobija que ya no utilices y colocarla en el lugar reservado para ellos.
Seguridad dentro del vehículo
Para nosotros es un tema de vida o muerte el uso del cinturón de seguridad, pero ellos no pueden usarlo. Sin embargo, puedes protegerlo a él y a tu familia, en caso de un accidente.
Considera el peso de tu peludo como un bulto que al momento de impactar un vehículo o un frenón de emergencia, será proyectado hacia delante con una fuerza y velocidad capaz de lesionar gravemente a las personas que se encuentran enfrente, o bien, él impactarse contra el parabrisas, asientos o ventanas laterales, provocándole lesiones graves o incluso la muerte. Dicho lo anterior y para prevenirlo, considera tres cosas: Pechera, cinturón de seguridad para perros y/o una transportadora.
Las pecheras y los cinturones de seguridad hacen una dupla perfecta y segura. Colócale la pechera y sujeta un extremo del cinturón en donde normalmente pondrías el broche de la correa y el otro en el broche del cinturón de seguridad del carro (el que está pegado a los asientos o en medio de ellos).
La distancia la decides tú, de acuerdo al tamaño de tu peludo, le debe permitir cambiar de posición, de sentado a echado, sin ocasionarle molestia, pero limitarle el movimiento para que no esté paseando dentro del vehículo.
Si el espacio dentro de tu automóvil y su tamaño lo permiten, puedes meterlo en una transportadora o kennel durante el viaje, ya sea en el asiento de atrás o en el de adelante, y aquí sí, coloca el cinturón de seguridad del automóvil alrededor de la transportadora para evitar que se mueva en caso de accidente.
Ansiedad
Hay peludos que saben comportarse dentro del carro, que incluso disfrutan y se emocionan durante los viajes, sean cortos o largos, pero otros por falta de costumbre o por ser muy nerviosos no la pasan nada bien y, por el contrario, se vuelve un tormento la sola idea de intentar subirlos.
De nueva cuenta, puedes acercarte a tu Médico Veterinario y preguntarle por productos con feromonas especiales para casos así. Dependiendo de su edad y su condición física o su caso en particular, puedes encontrarlos en collar o en difusores que deberás colocarle a él, dentro de su transportadora o incluso dentro del vehículo.
Siguiendo estas medidas, ahora sí, ¡feliz y seguro viaje para todos!.