Sí, yo mero Fygo. ¡Feliz San Valentín! Mi regalo para ustedes: una deliciosa receta para que sorprendan a esa persona especial.
Necesitamos:
- 2 tazas de harina
- 1 taza de crema para batir
- 1 taza de blueberry
- 1/3 taza de azúcar glass
- 280 gramos de chocolate blanco
- 100 gramos de mantequilla
- 1 huevo
- 1 yema de huevo
- 2 cucharaditas de esencia de vainilla
- 1/2 cucharadita de sal
- 1 playerita que delate tus intenciones
Paso 1: Nos lavamos muy bien las patitas. No le vayan a querer dar toloache a esa personita especial, que nos quieran como somos.
Paso 2: En un recipiente ponemos el harina, azúcar glass, mantequilla, buebito, amarillito de buebito, sal y una cucharadita de esencia de vainilla.
Paso 3: Amasamos con todas nuestras michijuerzas hasta crear una masita suavecita y uniforme.
Paso 4: Envolvemos la masita en papel film o en una bolsita.
Paso 5: La llevamos al refri 20 minutos para que esté más firme y manejable.
Paso 6: En una superficie limpia, ponemos tantita harina y estiramos la masita.
Paso 7: Forramos nuestros moldes de tartita con la masita estirada y con un tenedor le hacemos muchos piquetitos en la base para evitar que se le infle la pancita en la horneación.
Paso 8: Llevamos las tartitas al horno previamente precalentado a 180 grados, por 20
minutos.
Michiconsejo: Si usted apenas está saliendo con el prospecto o seamos sinceros, todavía no lo quiere tanto como para arriesgar sus pestañas en el horno, puede triturar galletas Maria, agregarle mantequilla líquida, una cucharadita de esencia de vainilla y con su patita crear la base compactando la galleta. Y en lugar de llevarlo al horno, lo metemos al refri por 30 minutos para que se ponga más frío que el corazón de su ex.
Paso 9: Mientras las bases de tartita se hornean, ponemos en una ollita a fuego medio
violento la crema para batir.
Paso 10: Ya que la crema para batir este caliente, la retiramos del horno, agregamos el pocholate, la otra cucharadita de esencia de vainilla y le damos vueltas y vueltas hasta que se derrita por completo el pocholate, para crear nuestro ganache.
Paso 11: Dejamos enfriar nuestras bases de tartitas y ganache de pocholate.
Paso 12: Ponemos con una cucharita abundante ganache de pocholate hasta llenar ese vacío en el corazó… –que diga– en la tartita.
Paso 13: Encima de nuestro ganache agregamos la frutilupis, para que no digan que esto es pura engordación, también lleva su parte fit.
Paso 14: Las llevamos al refri por 2 horas para que se tonifiquen.
Paso 15: Sacamos y desmoldamos.
¡Y están listas para ser devoradas! Los amo, baiiis.