¿Te ha sucedido que cuando estás muy estresado y llevas un largo periodo sin comer, comienzas a tener malestares gastrointestinales, como gastritis, colitis, estreñimiento o diarreas?
MVZ EMCV (EC) Aline Ixtab Morales Estrada
MVZ EMCV (EC) Alejandro Pérez Castañeda
Especialistas en etología clínica
Esto ocurre debido a la cantidad de jugos gástricos que se pueden producir en episodio de estrés, y también suelen vivirlo los perros.
Muchos pequeños que pasan periodos largos de ayuno, mientras cursan con algún problema conductual intensifican dichos problemas debido a una mayor irritabilidad por la incomodidad que puede causar la presencia de jugos gástricos en ausencia de alimento, por lo tanto, un perro agresivo será mucho más reactivo a los factores que no le agradan, un perro con ansiedad por separación, se sentirá mucho más sensible a la ausencia de sus tutores, y un perro con miedo a estímulos, como autos, bicicletas, patinetas u otros factores, se sentirá más incomodo ante la presencia de los mismos.
Cuándo darle de comer
En este sentido, si tu perro es muy ansioso, temeroso o agresivo te recomendamos darle de comer mínimo 2 veces al día, o bien si tiene muy separadas sus horas de comida y no tiene tanto antojo de sus croquetas durante el día, podríamos motivarle a que coma mediante la integración de algún juguete interactivo con un alimento en presentación húmeda, o si tu perro es fanático de las frutas o verduras podríamos utilizarlo dentro de los mismos juguetes.
Pero ten cuidado, no debemos sobre alimentar a nuestros perros con cada snack que se proporcione durante el día, basta con un juguete en medio del ayuno que normalmente vive, esto quiere decir que si tu perro come por la mañana y por la noche, el snack (juguete) podría proporcionarse a la mitad de la tarde y puede ser parte de su actividad mental.
Otro problema que se presenta comúnmente en nuestros perros es el apetito voraz, esto es el consumo de su alimento a una velocidad extrema, en ocasiones la presentan los perros que vivieron en una situación de competencia constante ya sea por vivir en la calle luchando por su comida, estar en un hogar donde la cantidad de alimento no era suficiente para el número de perros o bien una de las prácticas más comunes y mal recomendada por mucha gente, el introducir nuestra mano a su plato o retirarlo una vez que inician su alimentación. Cuando realizamos esta práctica nuestros perros entran en un estado de miedo por perder su alimento, muchos intentan proteger su alimento mostrándose agresivos pero hay otros que apresuran su velocidad de consumo.
Hinchazón, eructos y gases
Al alimentarse tan velozmente, nuestros perros introducen a su cuerpo grandes cantidades de aire lo cual puede provocar situaciones de eructos excesivos o bien una hinchazón abdominal que se traducirá en dolor (cólicos) mostrándose irritables en situaciones que normalmente no lo serían. Si tu perro tiene este tipo de conducta puedes ayudarle utilizando platos de alimentación lenta, los cuales tienen un laberinto interno o nuevamente con juguetes diseñados para alimento seco, los cuales tienen que mover, patear y morder hasta conseguirlo.
La alimentación no tiene que ser siempre tan aburrida, cuando se provee en diferentes presentaciones puede llamar la atención de tu perro, una gran alternativa es dar una parte de su ración en tapetes olfativos, esos tapetitos que tienen barbas largas. Los puedes hacer en casa o conseguirlos comercialmente. Este tipo de enriquecimiento le ayudará a tu perro a desarrollar mucho mejor su olfato dándole diversión y a la vez una gran estimulación a nivel mental.
No olvides que la nutrición será distinta de acuerdo a la edad de tu perro y es fundamental para el correcto desarrollo físico y mental, así que un médico veterinario preparado en el área de nutrición será tu mejor aliado para darte una correcta asesoría y que tu amigo peludo tenga una mejor capacidad cognitiva gracias a su alimentación.