M.V.Z. Ma. Miguel Ángel López Núñez
Los gatos son animales fascinantes, por muchos siglos han acompañado al ser humano y a diferencia de los perros, que son mascotas muy predecibles, están rodeados de una serie de mitos y tabúes que pueden o no ser realidad.
Algunas personas creen que los gatos enferman a las mujeres embarazadas y a sus bebés. Esto puede ser cierto siempre y cuando el gato no esté desparasitado o sufra de toxoplasmosis; y que además la mujer embarazada consuma heces del animal enfermo.
Basados en que los dueños son responsables, mantienen a sus mascotas en ambientes limpios y de los lleven regularmente al médico veterinario, las posibilidades de que esto suceda son prácticamente nulas.
Los gatos son animales muy ágiles, flexibles y la mayor parte de las veces caen de pie al piso. Obviamente esto no sucede el 100% de las ocasiones y depende mucho de la altura de la que caiga, además de su peso y complexión.
Es muy común creer que el cortar los bigotes a los gatos hará que se desorienten e incluso que pierdan el equilibrio. Esto es parcialmente cierto; los bigotes de los gatos tienen una gran cantidad de receptores nerviosos que les sirven para ubicarse y medir distancias, sobretodo en la noche, cuando hay poca luz. Cortar los bigotes a nuestro gato puede llevar a dificultar su movimiento, principalmente durante la noche.
También se cree que los gatos y los perros siempre se llevan mal. Esto no es completamente cierto ya que hay muchos ejemplos que muestran que si ambos conviven constantemente y preferentemente desde edades tempranas, se pueden llevar muy bien.
Existen también muchos mitos que se refieren a su nutrición. A los gatos, a diferencia de los perros, no les causa ningún placer comer alimentos dulces. También se cree que los gatos disfrutan mucho de la leche y es necesario alimentarlos con ella; la realidad es que los gatos que han sido destetados difícilmente pueden digerir la lactosa, que se encuentra presente en grandes cantidades en la leche, lo que lleva a que el gato presente diarrea y gases.
Lo que no es un mito
Con el fin de tener la certeza de que nuestro gato permanezca sano y con una buena calidad de vida, es muy importante ofrecerle un alimento elaborado por expertos en nutrición que desarrollan alimentos balanceados, Premium y Super Premium. Además, se recomienda no complementar su alimentación con ningún otro tipo de aditivos, vitaminas o minerales salvo que el médico veterinario así lo indique.
Recordemos que una mascota bien nutrida es una mascota sana, y una mascota sana es una mascota feliz.