La empatía se define como la capacidad de comprender y compartir sentimientos de otro ser. Es una cualidad esencial en la construcción de una sociedad más justa y compasiva pero, ¿y la empatía hacia los animales?
Isabel Martínez.
Esta habilidad humana no solo se extiende a nuestros congéneres, sino también a los animales, especialmente a aquellos que viven en situación de calle. Entender y responder a las necesidades y sufrimientos de los animales marca una diferencia significativa en su calidad de vida y en el bienestar de tu comunidad.
Si desarrollamos empatía hacia los animales seremos capaces de reconocer que ellos también experimentan dolor, miedo, hambre y frío. Esto ha sido un paso crucial para motivar a las personas a actuar en beneficio de los seres vulnerables. Si podemos ponernos en el lugar de un perro hambriento o un gato herido, es más probable encontrar soluciones para aliviar su sufrimiento.
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Pero este proceso no solo aplica para los que sufren en la calle, sino para entender porqué algunas cosas en casa, que tenemos normalizadas por falta de información, son muy mala idea.
“¿Esto no le hace daño al perro/gato, verdad?” es una pregunta constante de parte de quien no tiene mucho contacto con animales, refiriéndose a ciertos juegos, caricias bruscas, bromas pesadas o engaños.
“Deja que te peguen palmadas en la cabeza, o que te jalen la mejilla, a ver cuál te parece mejor”
– explica constantemente en sus pláticas la Dra. Claudia Edwards, especialista en comportamiento canino y felino.
Al ser empáticos, o ponernos en su lugar, la mayoría de esas respuestas se dan solas, siempre y cuanto entendamos que nuestros procesos sensoriales y emocionales son realmente muy similares.
Fomentar la empatía con los animales desde una edad temprana es fundamental. Programas educativos que enseñen a los niños sobre el cuidado y respeto hacia ellos, puede sembrar semillas de una sociedad más compasiva. Además, campañas de concienciación dirigidas a adultos destacando la importancia de adopción responsable y esterilización de animales puede prevenir la sobrepoblación.
