El Pastor Holandés, como todos los pastores, son excelentes cuando se trata de aprender cosas y ayudar a las personas.
Debido a su gran energía, de hecho, es indispensable para ellos tener una actividad fija, constante, que los rete mentalmente y les exija mucha atención y concentración. Su color atigrado suele ser muy imponente, pero en realidad puede ser también un perro muy cariñoso y juguetón.
Y como seguro podrás notar, su genética está en muchos perros mestizos del mundo, ¡por lo que también ellos es factible que hereden su inteligencia y obediencia!
Si tienes un Pastor Holandés, o un mestizo con sus características, tienes una máquina viva de aventuras y alegría.