En el mundo existen alrededor de 400 enfermedades zoonóticas –es decir, que se pueden transmitir de animales a humanos- en todo el mundo, y muchas son endémicas por países o regiones.
En México contamos con alrededor de 174 enfermedades de importancia según datos de la Organización Mundial de la Salud OMS, y la Organización Panamericana de la Salud OPS, y se sabe que el perro es capaz de trasmitir 53. Pero quizá ninguna tiene tantos mitos y provoca tanto miedo, como la Rabia.
La dichosa rabia
La Rabia es una encefalomielitis viral aguda. De todas la enfermedades zoonóticas la más conocida y antigua, causada por un Rhabdoviridae, casi siempre fatal en animales y personas. Sin embargo en algunos continentes ya está erradicada o se encuentran muy cerca de ser así. Los portadores son principalmente animales silvestres como el zorro, el mapache, el zorrillo, el murciélago o algunos rodores. Estos pueden infectar a otros animales domésticos por medio de mordeduras.
Cierto es que un gato o el perro podrían hacer lo mismo al humano, pues el contagio es por medio de saliva de animales infectados. Sin embargo, gracias a las campañas de vacunación, y el cuidado de los animales en casa, un contacto así en una ciudad, se ha vuelto casi una leyenda, pues la mayoría de los Veterinarios ni siquiera han tratado un caso de rabia en toda su carrera.
En los animales no hay cura, pero si prevención, que se lleva a cabo con la vacunación obligatoria, es una enfermedad de notificación obligatoria.
Es importante destacar que no existe otra forma de transmisión en un contacto normal con otros animales. Es más, el tener contacto con la orina o heces, tampoco pueden contagiar, aunque sería mejor cuidarte de la orina si sospechas que tu animal tuvo contacto con ratas, por ejemplo, por la transmisión de otras enfermedades, como la leptospirosis.
¿Y los roedores? Por ejemplo una ardilla, si bien es un animal silvestre, debe ser contagiada por una mordedura de un animal enfermo, lo que es improbable pues por su tamaño, no podría sobrevivir a la mordedura de animales rabiosos mayores. Aún así, ten cuidado en la aproximación de roedores, y mejor respétalos a una distancia prudente.
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